1909 es el buque insignia de nuestra bodega.

La nombré en memoria de mi querido abuelo Marco, cuyo nombre llevo con orgullo, nacido en 1909, quien fue un mentor fundamental para mí.

Desde muy temprana edad me transmitió la pasión por las cosas bien hechas, el respeto por el trabajo y los sacrificios que conducen a resultados importantes.

El abuelo Marco tenía un carácter fuerte y resolutivo, pero encantaba con su humanidad, fuertes valores y largas historias que traía a la familia.

Sus características, tan distintivas, las redescubrí al probar esta obra maestra por primera vez y de inmediato tuve claro que era el vino perfecto para mantener viva su memoria.

Piemontés autóctono con sus 17° de graduación alcohólica es un concentrado inolvidable de emociones fuertes, a la vista, al olfato y al gusto.

Es un equilibrio perfecto entre elegancia y complejidad, con una fuerte estructura e intensidad, único en sus notas organolépticas.

1909 ganó 25 premios y galardones en todo el mundo, incluida la codiciada medalla de oro en el Concour Mondial de Bruxelles.

El 1909 no necesita Decanter, basta con descorcharlo media hora antes de degustarlo, manteniéndolo a una temperatura entre 16 y 20 grados.

La oleada de emociones que se liberan al verterlo es inmediata.

El color rojo rubí violáceo, único en su género y que muestra una gran estructura, es encantador.

Al girar dentro de la copa este gran vino, muy denso y estructurado, se formarán los clásicos arcos alrededor de la copa, sinónimo de altísima graduación alcohólica, y todos los aromas comenzarán a desprenderse con gran intensidad.

Chocolate, balsámicos, tabaco y una nota intensa de vainilla debido a la crianza de 36 meses en barricas especiales de roble francés. Intensos aromas persistentes acompañarán una verdadera experiencia sensorial.

La sensación en las papilas gustativas es única y casi contrastante.

Sentirás un vino muy estructurado, seco pero increíblemente aterciopelado al mismo tiempo para una agradable sensación de equilibrio y gran armonía en boca.

Para preservar la calidad del vino también hemos innovado el tipo de embotellado.

Las botellas utilizadas, estrictamente oscuras para evitar la exposición a la luz, son únicas: ¡30 cm de altura, 1,2 kg de peso! Los corchos especiales que utilizamos, a pesar de ser de material natural, orgánico y reciclable, no son de corcho (único responsable del deterioro del vino en botella).

Por lo tanto, no temas, 1909 nunca sabrá a corcho y cada botella se puede conservar de forma segura a lo largo del tiempo.